Lo siento, no hay encuestas disponibles en este momento.

Sobre los resultados de las elecciones Legislativas 2025

El domingo 26 de octubre se realizaron las elecciones parlamentarias, nacionales de medio termino, cuyos resultados fueron 40,66% para La LIBERTAD AVANZA; 31,70% para FUERZA PATRIA; 6,95% para Provincias Unidas, y el resto se repartió entre armados provinciales, el FIT y otros.

Con estos resultados, el oficialismo nacional sorprendió con un triunfo y logró obtener 64 bancas de diputados, frente a las 44 que obtuvo Fuerza Patria, con lo que en la composición del futuro Congreso las bancas estarán repartidas de la siguiente manera: 101 diputados para FP, 93 para LLA, 25 para Juntos por el Cambio (aliados de Milei) y el resto quedara en manos de armados locales y del FIT. Esto potencia las posibilidades de Milei de avanzar con reformas legislativas; a eso hay que sumarle los resultados de la elección de senadores, en la que creció La Libertad Avanza; quedando 24 escaños para Fuerza Patria y 24 para la sumatoria entre LLA y el Pro.

En una primera evaluación sobre lo que sucedió en estas elecciones hay que tener en cuenta varias cuestiones.

Para comenzar, podemos decir que hay un gran sector del pueblo, de las grandes masas populares, que la están pasando mal, que vienen luchando contra la política de ajuste de Milei y que se han volcado a votar a favor de generar un freno a su política y en la necesidad de un cambio. Son los que han votado ha Fuerza Patria en Buenos Aires y en otros lugares del país, y a Fuerza San Juan en nuestra provincia.

Pero hay otro sector del pueblo argentino que también está muy maltratado por la política de gobierno de Javier Milei pero dudaba sobre cual era el camino, o qué paso dar en estas circunstancias, dudaba de dar el paso; y la duda de dar el paso la generaba la posibilidad que la pérdida electoral de Milei sumergiera al país en un gran desequilibrio político, económico y social sin una referencia sólida para confiar en una salida nítida con un programa que la convoque a no dar un salto al vacío sino a construir otra Argentina y que se perciba como posible.

La falta de unidad del peronismo nacional y de los sectores populares entre los que nos encontramos los comunistas revolucionarios provocó que no tengamos la suficiente fortaleza para generar ese polo que invite a dar el paso a los sectores que dudaban si cambiar o darle otra oportunidad a Milei.

No pudimos darle un referente sólido a la gente para decir, “damos este salto”, que no es el abismo, es solamente un paso que hay que dar para tener algo distinto. Es una meta a conseguir importante, un objetivo. Todavía no está pergeñado ese objetivo y el líder, falta un tiempo para generarlo, a pesar de los esfuerzos de gran parte de la base militante y también de una parte de la dirigencia.

Lo acontecido con el contundente triunfo electoral de Fuerza Patria en Provincia de Bs As en el mes de septiembre, fue un anticipo importante de lo que puede ser, pero no ha cuajado en esta unidad ahora. Las clases dominantes utilizaron muy bien la detención de Cristina, la aislaron o intentaron aislarla a pesar de que la fortalecen a largo plazo.

Reiteramos, la presión de que la derrota de Milei se hubiera convertido en un gran problema, en un gran desquicio político con una fuerte crisis económica retorno de la inflación suba del dólar etc. fue algo que las clases dominante y la principal potencia imperialista que posa sus garras sobre nuestro país (EEUU) fue utilizado para influir en la decisión de sectores desencantados que no se expresaban en elecciones anteriores y que esta vez decidieron votar por lo que entienden generaría estabilidad. El apoyo de Scott Bessent, secretario del Tesoro y Donald Trump presidente de los EE.UU, para con Milei, no fue estimado suficientemente por los dirigentes de los sectores populares, los sectores de las fuerzas del Justicialismo y las demás fuerzas que formamos Fuerza Patria no ubicamos este cambio de situación adecuadamente. Nos tomó a todos de improviso. A pesar de que, una semana antes, vimos el vendaval de los yanquis, de esa unidad oligárquica imperialista que nos parecía que no iba a resultar, pero resultó en ese sector de clase media que quiere equilibrio, que no quiere desbande.

Los sectores populares más oprimidos, mayoritariamente se jugaron el todo por el todo contra la política de Javier Milei. Sus preocupaciones son la falta de trabajo, los bajos salarios y jubilaciones, la quita de la asistencia social, entre otras cosas. Estos sectores del pueblo estaban más definidos, sobre ellos no hacía mella Trump ni Scott Bessent, querían y quieren frenar el ajuste.

Estamos entonces a mitad del camino, como son las elecciones intermedias. Nosotros los comunistas revolucionarios debemos alertar a todo el pueblo que si Milei con este triunfo electoral profundiza el ajuste y no pone a funcionar la economía real solo habrá más desequilibrio y nuevos y más dolorosos ajuste.

El país ha adquirido una deuda muy grande, impagable; y mientras gobierne Milei se van a generar todas las condiciones y políticas para pagarla, entonces es muy difícil que cambie de políticas, porque no van a cambiar la presión de los países imperialistas por cobrarla. Lo van a apoyar publicitariamente y decir que está todo bien, pero mientras paga deber seguir pagando, exigiéndole más y más leyes que le garanticen ganancias a sus empresas, como la reforma laboral para legalizar la jornada de 12hs de trabajo, sin aguinaldo, sin indemnización por despido y recortar derechos laborales o la reforma previsional para aumentar la edad jubilatoria a 70 años.

Es muy importante también entender que el gobierno de Milei no es una particularidad de nuestro país, sino que está vinculado a una corriente política de ultra derecha que ha surgido en el mundo, con mayor intensidad después de la pandemia del Covid 19 pero que ya venía gobernando en otros países. Con políticos como los Trump (EE.UU); Viktor Orban, (primer ministro de Hungría); Giorgia Meloni, (presidenta del Consejo de Ministros de Italia); el mismo Putin, Jair Bolsonaro (expresidente de Brasil); entre otros.

Y que esta corriente va a utilizar el triunfo de Milei en su disputa con la socialdemocracia y también con los sectores de la izquierda revolucionaria en el mundo.

Entonces todo eso influye y no es correcto aislar a la Argentina y decir “Milei es un caso argentino”. Su presencia está enmarcada en la disputa interimperialista creciente entre EE.UU. y China. Por eso no debemos subestimar el apoyo internacional que tiene y que sus aliados van a hacer todo lo que esté a su alcance para sostenerlo.

Es importante aclarar también que el campo Nacional y Popular ha mantenido un caudal de votos importante que es un gran activo para las luchas que se avecinan; por tanto, hay que organizar a quienes enfrentan el ajuste de Milei para ser una barrera a su política desde la calle y desde el Congreso mientras debemos desarrollar en política, un programa y proponer liderazgos desde abajo haciendo un gran esfuerzo para demostrar que otro camino es posible.

Fuerza San Juan

En medio de una sorpresiva ola violeta nacional, en nuestra provincia, se dio el triunfo del frente electoral que nuclea al justicialismo y sus variantes, en alianza con el comunismo revolucionario (PTP-PCR), el Frente Grande, el Frente Renovador y organizaciones sociales del campo popular. Este resultado es la consecuencia de una tenaz lucha por la unidad que se dio desde la misma constitución del frente: Fuerza San Juan, una acertada propaganda que puso el blanco en el gobierno nacional y un trabajo de campaña que apeló al protagonismo de los sectores consientes que más sufren su política de ajuste, crueldad y entrega de la patria.

Los resultados

En la provincia de San Juan votó el 71% de los empadronados, algunos puntos por debajo de la participación habitual que siempre ronda el 75%, pero por arriba de la media nacional. El frente Fuerza San Juan (FSJ) obtuvo el 34,5% de los votos válidos, Frente por San Juan (XSJ, oficialismo provincial, Marcelo Orrego) el 31% y La Libertad Avanza (LLA) el 26%. En el territorio eso se expresa con el triunfo de FSJ en 13 municipios (que ya dirige el peronismo), XSJ ganó en 5 (4 que dirigía y sumó 1 en el que doblegó a intendente peronista) y LLA ganó en 1 (la ciudad capital de la provincia, donde la intendenta es del oficialismo provincial).

Las encuestadoras fallaron todas. El oficialismo provincial y sus periodistas rentados se preparaban para festejar una paliza sobre el peronismo, pero una vez más nuestro pueblo indómito le hizo morder el polvo.

El valor de la unidad antifascista

En la última elección provincial ganó un gobernador que a nivel nacional se alineaba con Larreta, luego apoyó al Bulrich y en la segunda vuelta a Milei. Así cortó con 20 años de gobiernos justicialistas en la provincia. Del frente que gobernaba hasta ese momento se fueron muchos partidos y personajes que hoy están en el frente XSJ (Bloquismo, UP, squiaretismo, etc). Al mismo tiempo en el mismo frente que encaró las elecciones como Unión por la Patria, en el 2023, quedaron muchas heridas, divisiones y balances sin resolver. Por ese motivo la forma de encarar la elección de este año era todo un tema a resolver.

En primer lugar, fue acertado reunir y reeditar la constitución del frente con el justicialismo, en el momento en que las clases dominantes de la provincia apostaban a la división, y fue posible gracias a la discusión de un programa con los sectores más progresistas y democráticos del mismo. La discusión por las candidaturas, fue una etapa difícil, que volvió a dejar heridos, pero que logró completar una lista plural, que expresa renovación y reúne a los sectores que tienen gestión, calles y territorios.

Edith Liquitay ingresó entre los seis integrantes de la lista, como representantes de nuestro partido, de las mujeres sindicalistas y de la lucha universitaria contra el ajuste libertario.

Y por último, fue importante definir bien el discurso de campaña, ya que el oficialismo provincial en estos dos años fue el aliado de Milei en el congreso, pero que en la provincia tiene diferencia en aplicar el ajuste. Por un lado, el gobernador Orrego apoya al gobierno nacional para dar gobernabilidad, mientras que les hace zancadillas a los intendentes justicialistas, pero por otro, otorgó el boleto gratuito a docentes y estudiantes, votó en favor de la ley de financiamiento universitario, etc.

La lista de FSJ puso el acento en la crueldad del gobierno nacional y en la necesidad de llevar al congreso diputados que le pongan un freno a su política. De soslayo se golpeó al oficialismo de la provincia por tibio contra el ajuste.

Corriente silenciosa

El votante de la libertad avanza sigue siendo un fantasma. Es una corriente heterogénea, por una parte está conformada por un sector de la masa que se asustó con el salto al vacío, el regreso de la inflación y la volatilidad cambiaria, y por el otro personas en las que ha calado el discurso liberal individualista. No solamente se les escapa a los encuestadores, sino que a nuestra fuerza le cuesta detectarlo y entablar un debate con ellos. Aparecen personajes estrafalarios como “Las fuerzas del cielo”, o desconocidos como el nuevo diputado nacional que ingresará por la provincia en diciembre próximo, y tendemos a pensar que a eso se reduce esa corriente. Una cosa son los dirigentes circunstanciales que se encuentran con los resultados y otra es la corriente que en determinadas circunstancias vota unida. Es una masa que obra silenciosamente, que no debate, no acompaña actos, no milita, pero que todavía le sigue dando chances a un proyecto político que en sus formas aparece como completamente distinto a todo lo anterior. La experiencia de esas masas con el proyecto libertario, todavía no las ha convencido de que es contraria a sus intereses. Recibieron apoyo de votantes de sectores populares como obreros, desocupados, jubilados, docentes, estatales, cuentapropistas, estudiantes, integrantes de la comunidad LGTB, etc. que siguen dolidos por “la pandemia, el kichenrismo, y la casta” y no quieren volver atrás.

El oficialismo de San Juan

El gobernador Macelo Orrego sabiendo que enfrentaba una prueba difícil, ya que de entrada quedó fuera de la polarización nacional, para esta elección jugó como candidatos a su vice gobernador y a una ministra, ambos con buena imagen positiva. Pero incluso eso no alcanzó y en la última semana de campaña él mismo se puso en la foto de candidato y encabezó todos los actos. Necesitaba ganar para fortalecer su situación frente al gobierno nacional y puso muchos recursos, desde muebles y mercadería para regalar en “bingos” hasta la prohibición de sacar a los candidatos opositores en los medios de comunicación con pauta oficial.

Esto configuró un escenario de tercios en la provincia, donde FSJ se perfiló claramente como anti Milei, y ellos intentaron un discurso de “apoyar lo bueno y criticar lo malo” del gobierno nacional. Pagaron con un segundo puesto esa línea tibia y dubitativa, que los caracteriza.

Mejores condiciones

El triunfo de FSJ crea mejores condiciones para seguir enfrentando a una derecha ultra reaccionaria. Hoy el PTP.PCR está fortalecido y activo, gracias al rol que jugaron sus militantes más decididos, con la candidata Edith Liquitay a la cabeza. La participación en la campaña, con un ritmo de trabajo y militancia muy fuerte, tensó a todo el partido y lo puso a discutir sobre la política y la salida. Anudamos relaciones con lo más combativo, progresista y popular del frente, y eso nos permiten seguir trabajando e intentando volcar a la lucha política y sindical a las masas que sufren el ajuste del gobierno nacional y su política de entrega.

Comisión Política PCR-PTP-San Juan