LA deuda eterna

El tema de la Deuda Externa en la Argentina es de larga data comenzando por el crédito de la Bahring Brothers en la década de los 20 del siglo XIX que tardó más de 100 años en cancelarse. Pero nos remitiremos a épocas más actuales.

Cuando en 1976 se produce el golpe militar al gobierno de Isabel Perón dejó una deuda de 7.600 millones de dólares, cuando los militares entregaron el poder en 1983 la Deuda Externa llegaba a 45.000 millones de dólares. En esa época comenzaron varias prácticas fraudulentas que siguieron en gobiernos posteriores hasta nuestros días como sobre facturación de exportaciones, apertura a las importaciones, obtención de préstamos que jamás entraron al país pero sí que debemos pagar. Fueron nada más que registros contables, el dinero realmente quedó en manos de los bancos extranjeros y de los negociadores nacionales.

A partir de las investigaciones del patriota Don Alejandro Olmos y sus presentaciones en el juzgado del Dr. Ballestero se logró que éste, en el año 2000, declarara que la Deuda Externa generada en los años1976/1983 es ilegítima y fraudulenta, detectándose 477 ilícitos.

Ese fallo fue girado por Juez Ballestero al Congreso Nacional, porque la Constitución indica en su artículo 75, inciso 7 “que el tratamiento de la Deuda Externa corresponde al Congreso. Sin embargo este tema nunca fue tratado del 2000 a la fecha.

Lo grave es que ningún gobierno luego de ello detuvo esta sangría.

En el 2015 la Deuda Externa alcanzaba según el Ministerio de Economía a 254.000 millones de dólares a pesar que ya había comenzado la práctica del endeudamiento interno estatal, apropiándose de fondos del ANSES, Banco Central, Banco Nación, etc. Teniendo en cuenta que el gobierno de los Kirchner la había tomado según el Ministerio de Economía en 154.000 millones de dólares, esto quiere decir en 12 años de los Kirchner la aumentaron en 100.000 millones de dólares más. Ahí se demuestra que no hubo desendeudamiento.

Gran parte de estos fondos fueron a financiar gastos corrientes como PROCREAR, POCREAUTO, computadoras, pago de sueldos a organismos del Estado, esto motivó que la presidente Cristina Fernández de Kirchner vetara el 82% móvil para los jubilados.

¿Cuál es la situación al día de hoy?: Era Macri

La Deuda Externa supera los 300.000 millones de dólares, a esto hay que sumarle la deuda cuasi fiscal por ser propia del Banco Central, que es la deuda por LEBAC (Letras del Bco. Central).

Estos instrumentos son emitidos a plazos muy cortos, la mayoría son a 30 – 35 días, se renuevan en forma casi total y además se incrementan todos los meses en subastas en las que participan solo un docena de Bancos que forman una especie de oligopolio de compradores. Esto a tasas de interés de alrededor del 27% redunda en 270.000 millones de peso por año sólo en concepto de intereses. Lo que significa unos 740 millones de pesos diarios. Que equivale al pago que hace el Tesoro por la Deuda de la Administración Central (700 millones de pesos diarios según presupuesto 2017).

Nunca ha ocurrido a nivel de la historia financiera del país y no se tiene conocimiento de una situación análoga  en otras partes del mundo.

El nivel de reservas llega a 48.900 millones de dólares en base a los datos del 31-8, pero tales reservas no son propias que fueron compradas con emisiones de deuda. El stock de las Reservas es superior a los 50.000 millones de dólares pero el stock de LEBAC que sirvieron para comprarlas supera a los 60.000 millones de dólares

Recientemente el Bco. Central comenzó a elevar las tasas de interés de la LEBAC a plazos mayores de 35 días, para tratar de mejorar los rendimientos de los tomadores de letras, por lo que los prestamistas obtienen tasas de ganancias que son las más altas del mundo, con estabilidad cambiaria mediante.

Toda esta enorme masa de dinero que el Bco. Central de la circulación vía LEBAC tiene entre otras cosas, tres consecuencias graves para la economía argentina:

Aumento de la deuda cuasi fiscal y los intereses a pagar por ella.

Estimula en forma perversa el desvío de dinero de los negocios productivos a los especulativos financieros.

Disminuye la cantidad de dinero prestable por los bancos privados y oficiales y con ello disminuye también el destino productivo del crédito, aumenta su costo y sus consecuencias recesivas se transmiten a la Economía Física y Real.

Como corolario se puede decir que el gobierno de Macri es un gobierno absolutamente deuda-dependiente, es decir una administración sostenida por el capital financiero – bancario a través del aumento sistemático de la Deuda Pública.

La totalidad de los vencimientos no se amortiza en forma neta si no que se refinancia íntegramente con nueva deuda.

El año pasado la deuda creció en 34.500 millones de dólares como producto de 254.000 millones de dólares que quedó a fines del 2015, administración de CFK, y 288.500 millones de dólares, stock de deuda al 31/12/2016, administración Macri. Eso incluye la deuda remanente de los holdouts (8.500 millones de dólares) y los cupones PBI (13.000 millones de dólares).

La nueva Ley de Presupuesto 2017 prevé un incremento de 38.200 millones de dólares.

Según el Proyecto de Ley 2018 aparece modificaciones: el aumento del stock de deuda sería de 44.000 millones de dólares y no de 38.200 millones de dólares, no se conoce el respaldo legal de esta diferencia de unos 5.800 millones de dólares más de lo previsto en el Presupuesto, pero se trataría de obligaciones nulas porque la Ley de Administración Financiero del Estado establece taxativamente en su artículo 60 que no se pueden formalizar operaciones de crédito público si no están contempladas en la Ley de Presupuesto.

El extraordinario crecimiento de la Deuda Pública en lo que va de la Administración Macri superaría el aumento de endeudamiento bajo la administración Kirchner 2003-2015 que, pese al discurso de desendeudamiento, aumentó la deuda del Estado en algo de 100.000 millones de dólares.

Macri incrementaría la Deuda en 34.500 millones de dólares en 2016, más de 38.200 millones de dólares en 2017, agregando los 46.500 millones de dólares previstos para el 2018, llevaría el crecimiento a 120.000 millones de dólares en tres años.

Colocar 113.000 millones de dólares en un año equivale a 6.000 millones de pesos por día (310 MD) lo que es igual a 250 millones de Pesos por hora (13 MD).

En el año 2017 hay una diferencia en el Proyecto de la Ley de Presupuesto y lo que efectivamente se pague, estaba previsto abonar 13.200 millones de dólares por intereses pero ahora se ha elevado esa previsión  16.600 millones de dólares aunque algunos la elevan hasta 19.000 millones de dólares.

Probablemente esta diferencia se explique por el pago de intereses a los Holdouts que fue arreglado en abril del año pasado pero los términos e importes así como el cuadro de situación actual se desconocen, porque el gobierno no ha cumplido con su obligación legal de informar al Congreso al respecto.

Para el 2018 el Proyecto de Ley de Presupuesto prevé que el pago de los intereses aumente a 21.200 millones de dólares, de los que poco más de la mitad se abonaría en moneda extranjera.

Este rubro del pago de los intereses de la Deuda es el de mayor importancia dentro del Gasto Público del presupuesto 2018, después del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, aunque este último conlleva toda la masa del Sistema Previsional que se contrabalancea con los ingresos respectivos.

El gasto total por intereses es casi el doble de Seguridad Social (120.900 millones de pesos) y Defensa (116.500 millones de pesos) juntos, duplica también la suma de Educación (163.200 millones de pesos) y Ciencia y Tecnología (19.300 millones de pesos), también lo de Desarrollo Social (174.600 millones de pesos) y multiplica por 7 los gastos de salud (56.500 millones de pesos).

Es el gasto que más crece 28% para 2018, siendo que el Gasto Público primario, sea intereses del 16%, siendo uno de los factores determinantes de mayor peso del Déficit Fiscal.

Casi 3 de cada $10 del Gasto Público es destinado al pago de intereses, el pago de intereses anuales significa un promedio 57,5 millones de dólares por día o 2,4 millones de dólares por hora.

La capitalización de intereses (anatocismo) es la situación más grave en que se encuentra un deudor y causante en que los intereses devengados y no pagados se suman al capital original y generan nuevos intereses.

Así por aplicación del Interés Compuesto, el anatocismo es uno de los puntos más graves del sistema de la Deuda Perpetua que condiciona las Finanzas del Estado Argentino: la refinanciación total y permanente de los vencimientos de capital a medida a medida que se van produciendo, por falta de capacidad de repago, aumenta en forma continua y extraordinaria el monto del principal y el consiguiente pago de más intereses.

La crisis del 2001 se produjo por circunstancias análogas.

El Proyecto de Ley de Presupuesto informa que en 2017, 4.900 millones de dólares no se pagarían, y en 2018 sucedería con 6.400 millones de dólares de intereses.

El anatocismo configura una zona de alerta roja para las Finanzas Fiscales y la materialización de la lógica del Sistema de la Deuda que es la usura, no sólo entendiendo como la dependencia condicionante frente a los acreedores sino además el callejón sin salida de una trampa de deuda perpetua frente a los capitales financieros donde el deudor nunca puede dejar de ser deudor.

En este marco de la usura la administración Macri redobla su apuesta de gobernar con deuda como requisito indispensable de su estabilidad financiera y política.

Todo lo dicho nos demuestra que es una Deuda Perpetua y una Deuda Impagable, que no tiene una solución económica si no política, por eso proponemos:

Investigación del total de la Deuda del Estado, sea interna  o externa.

¡No pago a la Deuda Externa sin antes investigarla!

¡No pago a la Deuda ilegítima y fraudulenta, usuraria y odiosa!

Nota: Agradecemos al Lic. Héctor Giuliano por habernos brindado los datos necesarios para la elaboración de este informe.-

José Aguilar

FORO ARGENTINO DE LA DEUDA EXTERNA

– REGIONAL MAR DEL PLATA –

e-mail: forodeudaexterna1mdp@yahoo.com.ar

Mar del Plata, 27 de Octubre de 2017.-

Foro Argentino de la Deuda Externa – Regional Mar del Plata –