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Presiones, cambios de voto y tensión: así se blindó el veto presidencial al aumento de jubilaciones

Luego de haber logrado voltear el veto presidencial a la ley de emergencia en discapacidad, la Cámara de Diputados no consiguió los dos tercios necesarios para insistir con el proyecto que incrementaba los haberes de los jubilados. El resultado fue ajustado: 160 votos afirmativos, 83 negativos y 6 abstenciones. La iniciativa, impulsada por la oposición, proponía un incremento del 7,2% en los haberes jubilatorios y una ampliación del bono excepcional a $110.000 para quienes cobran la mínima.

A diferencia de lo que ocurrió con la votación del veto anterior, esta vez el oficialismo logró blindar el rechazo del presidente a la norma, en una sesión marcada por la tensión, las denuncias cruzadas y un escenario completamente abierto hasta el último minuto. Ni el Gobierno estaba seguro de conseguir el tercio necesario para sostener el veto, ni la oposición tenía garantizados los dos tercios para insistir. Todo se resolvió voto a voto, con llamados cruzados, movimientos de último momento y fuertes acusaciones dentro del recinto.

Mientras se acercaba el momento de la votación, comenzaron a multiplicarse los rumores sobre presiones ejercidas por gobernadores sobre diputados de sus provincias. La denuncia tomó cuerpo en medio del debate, con varias intervenciones que apuntaron directamente a maniobras de último momento para torcer voluntades. “Hubo algunos que trataron el emplazamiento de este tema y ahora están mirando para otro lado. Hay otros que contribuyeron a la media sanción y ahora están mirando para otro lado. Más que nunca hay que ser serios y tener convicciones ante este tema”, lanzó Germán Martínez, jefe del bloque de Unión por la Patria.

Pablo Juliano (UCR) fue más directo: “Si vos venís a transfugiar tu voto acá y traicionás a los jubilados que no pueden llegar a fin de mes, no sos digno de estar sentado en estas bancas. No hay llamado del Gobierno nacional, no hay llamado del gobernador de tu provincia, no hay llamado de nadie que te tenga que dar vuelta el voto. Te está mirando el país”. Y agregó: “Le estoy hablando a los ciento cincuenta y nueve diputados que hace un ratito acabaron de habilitar este tema, no para ganarle a Milei, sino para que gane la Argentina”. En referencia de quienes votaron a favor de habilitar el tema para el tratamiento, para lo que también se requirieron dos tercios.

Fernando Carbajal, también radical, fue aún más categórico al denunciar directamente a las provincias: “Aprovecho para denunciar que algunos gobernadores están presionando a sus diputados. No sean crápulas. Es una forma de corrupción cambiar ATN por un voto contra los jubilados”.

El resultado dejó expuesta la fragilidad política los bloques y el peso que tienen, en votaciones tan sensibles, los alineamientos territoriales. Varios diputados que habilitaron el tratamiento del tema, viraron su postura o se abstuvieron. Entre las abstenciones se destacaron los cuatro diputados misioneros de Innovación Federal que responden al líder renovador Carlos Rovira, además de Marcela Antola, cercana al mandatario entrerriano Rogelio Frigerio, y María Eugenia Vidal, quien no integra la alianza oficialista pero eligió no acompañar el rechazo al veto. Silvia Lospennato, del PRO, estuvo ausente en ambas votaciones, mientras que cuando se dio la media sanción se abstuvo.

Hubo también cambios de voto que llamaron la atención. Atilio Benedetti (UCR-Entre Ríos), Gabriela Besana (PRO), Gerardo Cipolini (Chaco), y los libertarios Alida Ferreyra y Alberto Arancibia, se ausentaron para la habilitación y horas después, votaron a favor del veto. En el caso de los legisladores de La Libertad Avanza, era esperable. Ricardo López Murphy y José Luis Garrido, santacruceño que responde al gobernador Claudio Vidal y forma parte del grupo autodenominado “Grito Federal”, votaron afirmativamente la habilitación, para luego manifestarse en contra de la ley.

También hubo legisladores que cambiaron en sentido inverso, aunque no alcanzaron para revertir el resultado. Rogelio Iparraguirre (UxP) y Carlos D’Alessandro, estuvieron ausentes en la habilitación del tema y votaron por insistir con la ley. D’Alessandro rompió con La Libertad Avanza luego de la votación de discapacidad y formó un nuevo bloque denominado “Coherencia”, junto a Marcela Pagano, Lourdes Arrieta y Gerardo González.

Los bloques que se pronunciaron mayoritariamente contra el veto fueron Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, la Coalición Cívica, el Frente de Izquierda y una parte del radicalismo. Pero no alcanzó. Esta vez, el Gobierno logró sostener su decisión, y la ley que prometía un alivio económico para jubilados y pensionados quedó sin efecto. Lo que quedó al descubierto, más allá del resultado, fue el clima de fragilidad institucional y la distancia entre lo que se vota en un día, y lo que se puede sostener en otro, en un Congreso donde los equilibrios se negocian en tiempo real.