San Juan, polo pistachero del país: proyectan llegar a 9 mil hectáreas en tres años
La visita del ministro de Producción y Desarrollo Económico, Ariel Lucero, al polo pistachero ubicado en el departamento 25 de Mayo, donde se encuentra el 90 % de las hectáreas de pistacho de San Juan, puso sobre la mesa el crecimiento que los productores han logrado y el que proyectan a corto plazo: en tres años habrá unas 9 mil hectáreas de pistacho.
El ritmo calculado es sobre 1.500 hectáreas por año, que se sumarán a las actuales 5.000 hectáreas, cifras de la incipiente Cámara Argentina de Pistacheros que, además, catapultan a San Juan como la principal productora de pistacho del país.
En el recorrido el paisaje es impactante, es que en 25 de Mayo el pistacho le ganó al desierto en una tierra virgen, donde nadie se había animado a sembrar nada.
Allí, se pudo observar todo el proceso del pistacho, desde la reproducción de plantas en vivero, plantas en distinto periodo de crecimiento, cosecha y procesamiento en fábrica.
“Este es uno de los sectores que más ha crecido dentro de las actividades productivas primarias de la provincia y tiene, además, un gran futuro. Lo que nos pide el gobernador Sergio Uñac en forma permanente es poder generar condiciones para seguir acompañando la potencialidad de cada una de las actividades”, dijo Lucero.
En 2022, en el marco del programa “Menos impuestos, más inversión”, una iniciativa del Gobierno de San Juan que cambia impuestos locales por inversión privada, se postularon 37 empresas por $ 7.000 millones, tres de ellas presentaron proyectos de pistacho.
El pistacho es un fruto seco con una demanda en plena expansión a nivel internacional y con un precio estable de 10 dólares por kilo.
Cuando la totalidad de hectáreas de la provincia estén en producción, va a significar (comparándolo con las exportaciones actuales de San Juan) un 10 % del total de las exportaciones provinciales.
“Es una actividad que está generando empleo, está generando desarrollo, y desde el Estado queremos seguir generando condiciones para que se pueda seguir creciendo. Los productores nos piden la posibilidad de continuar ampliando la superficie, pero tienen la necesidad de importar el material genético, importar las semillas para poder ampliar los viveros”, señaló Lucero.
Además, los productores necesitarán importar en un par de años, cuando las hectáreas entren en plena producción, más maquinaria de cosecha.
El crecimiento del polo pistachero implica la creación de empresas de servicios vinculadas, por ejemplo, para la cosecha y mantenimiento de equipos. Esto significa más puestos de trabajo.
En poco tiempo los productores han logrado profesionalismo en cada una de las etapas, incluso están vendiendo plantines a otras provincias como Mendoza.
El circuito
La vista comenzó en la finca de Facundo Balboni que cuenta con plantas en distintas etapas de crecimiento. Balboni tiene también un vivero donde, además de vender plantas, ofrece asistencia técnica a los interesados en plantar pistacho.
“El crecimiento del sector no tiene techo, siempre y cuando la situación socioeconómica y política del país acompañe. En cuanto a mi crecimiento me gustaría llegar a las 1500 hectáreas, ahora tengo plantadas 500 hectáreas, pero todo va a depender de que nos acompañe la realidad del país. Por otro lado, desde que estoy acá, (2015) la Provincia siempre nos acompañó muy bien, tanto de parte del ministro como de otras áreas del gobierno, para ayudar con cosas esenciales como los suministros energía”, dijo Balboni.
Luego fue el turno de la finca de los hermanos Bolsonella, Alejandro y Gustavo, que tienen una de las plantaciones más prolijas, un orgullo provincial.
“Nosotros venimos de chacra de toda la vida, pero ya nos cansamos de renegar, desde los 14 años trabajamos. Éramos productores, empacadores y exportadores de ajo y cebolla. Nos quedamos con nuestra actividad principal que es vivero de plantas de vid, que ya va por la tercera generación. Ahora encaramos esto del pistacho pensando en nuestro futuro y en bajar un cambio”, dijo Alejandro.
Finalmente, el grupo formado por el ministro, el secretario de Agricultura, Ganadería y Agroindustria, Martín Gómez; Facundo Balboni, Raúl Albiñana, y Patricio Vallejo, llegó hasta la finca de Marcelo Nemirosky, propietario de Pistachos de Los Andes, quien además cuenta con una planta de procesamiento de pistacho, única en su tipo.
Marcelo llegó a San Juan en 1997, de la mano de un diferimiento impositivo, pero no quería un cultivo tradicional así que optó por el pistacho. Fue uno de los tres pioneros que se animaron a este fruto seco que no tenía antecedentes en la provincia.
Confesó que tardó más de 10 años en involucrarse con la finca y perdió tiempo precioso. Ahora es un apasionado pistachero.
Lucero cerró el recorrido contando las líneas de crédito con tasa negativa que hoy tiene la provincia para el sector.
“La meta es poder, en conjunto el sector público con el privado, desarrollar el posicionamiento del pistacho argentino en el mundo. Hemos logrado desarrollar, junto con el gobierno nacional y con la Embajada Argentina en Brasil, la apertura del mercado brasilero para el pistacho argentino y sanjuanino en particular, y hay posibilidades de nuevos mercados”, destacó el ministro.