¿Quién está atrás de Sur Energy?: la empresa fantasma que el gobierno metió en el acuerdo con Open IA

El fantasma de aquella otra fallida mega inversión en la Patagonia, el Hidrógeno Verde de Alberto Fernández y Matías Kulfas, sobrevoló el anuncio de Milei y los ejecutivos de Open IA que prometieron invertir en algún lugar del sur argentino miles de millones de dólares para hacer un centro de datos de su proyecto global Stargate.
En la Argentina de los grandes anuncios en época preelectoral no sorprendió, como tampoco llamó la atención que a la difusa promesa se sume una pata local, completamente desconocida: en este caso la firma Sur Energy, que el CEO de Open IA, Sam Altman, calificó como «una de las más importantes empresas de energía de la Argentina», en un desprolijo anuncio que grabó leyendo el telepromter.
Excepto, que en el sector nadie conoce a Sur Energy, una firma que tiene página web doméstica y que mantuvo antes, durante y después del anuncio que involucró al presidente Milei, un completo silencio. Ni un tuit celebrando la noticia.
Un funcionario del gobierno que participó del anuncio, se despegó de Sur Energy: «Sur Energy es sólo un broker que une a las partes, hay dos empresas de egenría muy importantes atrás», afirmó.
La pregunta obvia es: ¿Quién impuso este broker, cuando las verdaderas prestadoras del servicio podrían presentarse asociadas o en una UTE?. La figura del broker que se lleva jugosas comisiones sin que nadie sepa bien porque, salvo los políticos involucrados, quedo muy clara en el caso de los seguros.
Sur Energy es sólo un broker que une a las partes, hay dos empresas de egenría muy importantes atrás.
La falta de precisiones del anuncio de Altman también despertó suspicacias, sobre todo por su cercanía a la administración de Trump, que ya no sabe que hacer para mejorar las chances electorales de Milei.
«No hay plazos, localización, proyecto, ni financiamiento claro», consideró en diálogo con LPO un consultor del sector energético. Mas preciso fue Elon Musk en un posteo en X: «OpenAI está construido sobre una mentira».
La aparición de Sur Energy en el anuncio agrandó las suspicacias. se trata de una compañía sin historial público, sin presencia corporativa real, sin trayectoria en inteligencia artificial y con una página web armada con Adobe. La web de Sur Energy tiene apenas un formulario de contacto, tipografía genérica y un mapa embed de Google.
Desde el gobierno argumentan que el Estado no forma parte del negocio entre Sur Energy y OpenAI, sino que se trata de «un deal privado» entre la empresa de Sam Altman y un intermediario sin músculo industrial ni reputación energética consolidada.
«Es fácil. El gobierno no tiene nada que ver. OpenAI anunció. Ellos pueden hacer deals con quien quieran», agregó el funcionario consultado.
En el sector circula una versión más filosa: «Nadie la conoce. La armaron de cero y alguno está prendido». Según esa versión sería el intermediario impuesto. Atrás se menciona a Central Puerto de Nicky Caputo y otra compañía importante.